Historia del Tambor del Llano
Tambor del Llano es una pequeña empresa que lleva años madurando y se ha consolidado como una iniciativa relevante en la Sierra de Grazalema. Los fundadores , un grupo de profesionales de diversos campos, intuíamos la necesidad de un cambio de modelo y queríamos hacer algo en el mundo rural, vinculado con la tierra. Buscamos un entorno adecuado en el que convertirnos en algo más que “veraneantes”, convencidos de que el genio del lugar sería la base para perfilar un proyecto más claro.
Cerca de Grazalema encontramos este lugar único, que nos ofrecía 32 ha de alcornocal, praderas y tierra para huertos, al borde de un río; en 2013, cuando la crisis atemperó los precios de la propiedad, los promotores constituimos una Sociedad Limitada e iniciamos una apasionante aventura, que hoy compartimos con las más de 5000 personas que cada año nos visitan para alojarse, montar a caballo, ver el firmamento, o visitar nuestro entorno,
Pronto perfilamos la idea de proyecto: regenerar la parte forestal de la finca, utilizar los prados para ganado (caballos y ovejas) y huertos y crear un alojamiento turístico de calidad pero sin lujos (el lujo es el entorno), rehabilitando una nave agrícola existente, que sería el motor económico del conjunto.
Ya en 2014 pusimos en marcha una línea de turismo ecuestre, Grazalema a Caballo; y cambiamos la gestión ganadera de la finca, sustituyendo cabras y vacas por ovejas, con una carga ganadera baja que permitiera criarlas en extensivo; compramos un rebaño de Merina de Grazalema, especie protegida; y empezamos a restaurar la finca, muy dañada por la sobrecarga de cabras durante décadas, protegiendo los brotes de nuevos árboles y plantando árboles y arbustos, autóctonos en las zonas forestales y frutales en la zona de huertos y jardines; 10 años después seguimos en ese proceso al tiempo que estamos empezando a cambiar nuestros pastos a una gestión regenerativa.
A finales del 2015 el hostal Tambor del Llano abrió sus puertas: un singular alojamiento en la naturaleza, con 10 habitaciones y una oferta diversa de actividades que cada día nos vinculan más con la naturaleza.
Nuestra vocación siempre fue más agropecuaria que turística, pero pronto vimos que el alojamiento sería el motor económico de todo lo demás y realmente es lo que ha consolidado y hecho sostenible el proyecto (nuestra categoría es hostal porque no queremos implementar cuestiones que son necesarias en Andalucía para ser hotel, como televisión en las habitaciones o recepción 24 horas).